Boyacá ha entrado en estado de
alerta amarilla hospitalaria debido a las crecientes tensiones generadas por el
paro de transportadores de carga en el departamento. El gobernador Carlos Amaya
ha anunciado tres medidas cruciales para manejar la situación y garantizar la
seguridad y el orden público. “Hemos instalado de manera permanente un Puesto
de Mando Unificado (PMU) que supervisará constantemente la situación en Boyacá,
debido a las alteraciones de movilidad y orden público provocadas por el paro”,
declaró Amaya. El PMU interinstitucional emitirá reportes diarios y se reunirá
a las 7:00 de la mañana para mantener a la ciudadanía informada.
En un esfuerzo por resolver el
conflicto de manera pacífica, Amaya ha decidido que la Defensoría del Pueblo y
la Asesoría de Despacho de Diálogo, bajo la dirección del doctor Alejandro
Gutiérrez, lideren las negociaciones con los manifestantes. “El diálogo será la
prioridad; no se usará la fuerza en este momento. Buscamos coordinar el paso de
misiones humanitarias y el transporte de estudiantes”, subrayó el gobernador.
Además, en respuesta a un trágico incidente en el que una mujer murió debido a
la falta de acceso a atención médica por los bloqueos, se ha decretado la
alerta amarilla hospitalaria para asegurar que todos los hospitales estén
preparados para cualquier emergencia. El gobernador hizo un llamado a los
transportadores para evitar bloqueos totales y permanentes, enfatizando el
diálogo como la mejor solución para el conflicto.
Fuente: caracol.com.co