El pasado 21 de marzo, durante visita de obra y rueda de prensa, el gobernador Carlos Amaya y el alcalde de Tunja, Mikhail Krasnov, firmaron un convenio por 5.100 para garantizar la terminación de la pavimentación de la Calle o Avenida 59 de capital boyacense.
En medio de las correspondientes manifestaciones de beneplácito, los dos mandatarios explicaron que para el efecto el departamento invertiría $4.835 millones y la Alcaldía Mayor de Tunja $273 millones de pesos más para concluir la importante obra.
Sin embargo, este 24 de mayo, es decir, 2 meses después de la dichosa reunión que contó con la presencia de congresistas, concejales y otros servidores públicos, lo único nuevo que hay en el lugar es una polisombra, cinta de seguridad y un pequeño relleno en el lado occidental del carril sur y nada más.
Ante esta situación, sería bueno que las contralorías departamental y municipal, la Procuraduría, interventoría y veeduría ciudadana se dieran una rodadita por la zona, para que, por lo menos, con su presencia se agilicen los trabajos, antes de que termine el año.
Es de recordar que el proyecto de apenas 320 metros de longitud y un puente sin mayores retos técnicos, promovido por la administración del exalcalde Luis Alejandro Fúneme González, tendrá una inversión final de más de 15.000 millones de los presupuestos de Tunja y Boyacá.
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